Escritos para desvelados

  Hace unos días me invitaron a una celebración y de entrada todo parecía bien y normal, personas festejando, algunos bailando, otros hablábamos, unos trataban ser el centro de atención y otros queríamos estar low profile, etc. etc. etc. Después de hablar, saludar a gente conocida y a otros que en mi vida había visto, de reírme hasta por los codos de las ocurrencias e historias que escuché y vi, de que me “presentaran” a personas que ya me habían presentado no sé cuantas veces y seguían “sin conocerme”, llegó un momento en que me quede “solo” estando rodeado de personas. Ahí me puse a ver y a analizar el comportamiento de los que ahí estábamos, algunos haciendo cosas normales pero otr@s estaban actuando raro, parecía que los papeles se habían invertido entre hombres y mujeres… (Voy a generalizar pero vuelva y lea arriba donde dije que algun@s hacían cosas normales.) Los “hombres” que ahí estaban andaban marcando territorio, floreteandose de un lado a otro, muy abiertos a hablar y a...

Buscando entre mis archivos encontré una carta que me escribió una amiga el día que me gradúe de arquitectura, debido a como es ella se lo afortunado que fui de que  ella me escribiera. Gracias por darme mi mejor regalo de graduación. Andrés... Andrés... Siii tuuu!! jaja.. que bolsa verdad? Es que no sé qué ponerte... ahh noo :( Perdón, es que sabes que soy poco expresiva, pero no importa, tratare de expresarme vía unas líneas. ¡FELICIDADES! OK... ya te lo eh dicho... Sabes, me quillo full, pensé que eras Arq. Pero no, hoy ya lo eres y eso me llena de satisfacción. ¡Ver que mi súper amigo Andrés ya es Alguien! Jajaja... No ya fuera de coro, de verdad, de verdad me alegra muchísimo. Porque has alcanzado una meta, has terminado algo... Pero este es el Inicio a una nueva meta... Ya Eres un Arq. ahora te toca el rol de desempeñar esa función. Te Graduaste, pues ahora se más que un simple Arquitecto, trasciende como lo sabes hacer. Se que serás más que grande, porque gracias a Papa D...

  Cuando éramos niños nuestro mayor deseo era ser adultos y entendíamos que para un niño ser adulto era llegar a los 18. Uno creía que con los 18 llegaba la independencia y la sabiduría JA JA JA definitivamente pensábamos como niños. Cuando llegamos a los 20s nos creemos capaces de TODO, entendemos que somos invencibles y con tiempo para hacer cualquier cosa que queramos, es la década en la que más desperdiciamos tiempo, procrastinamos hasta empalagarnos y nadie nos puede aconsejar porque ya si “somos adultos, y la vida es una sola y hay que vivirla!” Entonces llegan los 30s y vamos bajando un poco la velocidad, ya algunos piensan más las cosas, unos tratan de recuperar los años perdidos y ciertas cosas si se logran recuperar, pero otras nos damos cuenta ya no se pueden… es la década donde si nos creemos sabios porque “ya aprendimos de los errores de la juventud” y aun contamos las fuerzas necesarias para hacer cualquier cosa que nos propongamos. Entendemos que nos la sabemos TODAS...